¡El éxito te espera!

Muchos de los que lograron la grandeza tardaron años en alcanzar su dominio ...

Hace poco pensé que a lo mejor ya había pasado mi ‘fecha de caducidad’ y que ahora puede que sólo sirva para hacer un anuncio de crema antiarrugas; Mallorca TV estaba buscando una mujer de más de 35 años para un anuncio de televisión. No voy a inventar un producto que cambie el mundo, conseguir una estrella en el Paseo de la Fama, o, al paso que voy, convertirme en la siguiente Estée Lauder; una gran mujer de negocios de éxito internacional. En fin, estoy empezando a pensar que quizás para mí ya sea demasiado tarde para alcanzar la grandeza.

En cuestión de días tras tener esta gran revelación, estaba leyendo mi revista favorita, Red, y recomendaba un libro: Never too Late to be Great (Nunca es tarde para ser grande). Accedí inmediatamente a mi cuenta de Amazon en mi Ipad y encargué una copia, con envío exprés para poder leerlo cuanto antes y descubrir cómo cambiar mi situación. Cuando llegó el libro me pasé cada momento libre leyéndolo; el escritor Tom Butler-Bowdon es un conocido autor de desarrollo personal y el creador de la teoría de pensar a largo plazo en vez de buscar un éxito repentino.

La premisa principal del libro es que los últimos 10, 15 o 20 años han sido la plataforma desde la cual ahora puedes salir en busca del éxito. Es interesante que en los muchos ejemplos que da, habla de un período de 10 años como el número de años que una empresa o una persona necesita invertir para construir los fundamentos necesarios para conseguir el éxito real. Butler-Bowdon se refiere a este período como la fase de calentamiento y dice que con las crecientes expectativas de vida podemos vivir carreras activas hasta los setenta años o incluso más.

Un ejemplo es la inspiradora historia del icono del mundo de la belleza, Estée Lauder. Josephine Esther Mentzer se crió en una ciudad a las afueras de Nueva York, hija de inmigrantes húngaros y checos. Las personas que más influyeron en su vida fueron su cuñada Fanny, que dirigía unas galerías comerciales, y su tío John, un farmacéutico que elaboraba y vendía pequeñas cantidades de crema facial. Una gran aficionada a los productos de belleza comenzó a elaborar sus propias lociones y cremas en su cocina, y las vendía a tiendas y salones de belleza.

A los 22 años, se casó con Joseph Lauder, y su hijo Leonard nació 3 años después. Decepcionada con el poco progreso empresarial de su marido, se divorció de él cuando Leonard tenía 6 años. Conocida como Estée Lauder, dividía su tiempo entre Nueva York y Miami vendiendo sus cremas directamente a tiendas, salones de belleza y dando tratamientos faciales; fue la pionera de las muestras gratuitas que regalaba con cada compra.
Durante esta temporada mantuvo varias relaciones con millonarios pero decidió que estaba mejor con Joe y se volvió a casar con él en 1942.

Tuvieron otro hijo, Ronald, y Estée admitió que se había arrepentido de separarse de su marido y que ‘‘no se puede volar con una sola ala. ’’
En 1947, a los treinta y pocos, fundó Estée Lauder Inc, a pesar de que sus asesores la habían aconsejado no hacerlo, y en un año consiguió su sueño de vender productos en Saks Fifth Avenue. La pareja trabajó duro; ella se encargaba del lado comercial y Joe se dedicaba a la producción. Su gran éxito llegó en 1953 cuando lanzaron Youth Dew, un aceite de baño aromático desarrollado por Estée.

Leonard cogió las riendas del negocio en 1972 y siguió desarrollándolo hasta que llegó a ser la gran multinacional que es a día de hoy. Estée Lauder siempre quiso proteger a su empresa de los grandes conglomerados y mantenerla en familia. Aun a día de hoy la familia Lauder controla un 70% de las acciones. Estée Lauder nunca pensó en el éxito de la empresa a corto plazo, sino en la longevidad de la empresa y en el legado que dejaría a las generaciones futuras.

Todos sabemos que para tener éxito debemos sentir pasión por lo que hacemos, este es el primer paso en la escalera hacía la grandeza.  Butler-Bowden aporta varios ejemplos de personas que alcanzaron el éxito a una edad bastante avanzada para convencer al lector de que no importa la edad, todavía puedes conseguir tu sueño, tanto si es cambiar de profesión, escribir un libro o empezar un negocio.

Déjate inspirar, empieza a tomar los pasos necesarios y ten fe, pase lo que pase, puedes conseguir lo que te propones. Te espera el éxito, así que da un paso más cada día y lee Never too Late to be Great, (Nunca es tarde para ser grande), yo lo hice y ha conseguido renovar mi determinación por seguir mi sueño y a no rendirme incluso en tiempos difíciles. •

Never Too late to be Great by Tom Butler-Bowdon published by Virgin Books.

Nos encantaría conocer tu opinión sobre este tema así que no dudes en enviarnos un email a editorial@helencummins.com

Consejos para conseguir el éxito:

1. Dedica algo de tiempo en pensar qué sería posible en tu vida.
2. Siente el miedo pero sigue adelante.
3. Desarrolla tu reputación con acciones y no solo palabras.
4. Se fiel a ti mismo y a los demás.
5. Nunca pierdas de vista al motivo tras de tus esfuerzos.
6. No le des demasiada importancia a las cosas pequeñas.
7. Persigue tu pasión, no el dinero.
8. Si fracasas, aprende de tus errores y sigue adelante.
9. No pierdas el tiempo, ¡la vida es corta así que aprovéchala!.