Nos encontramos con el Dr. Morano en los frondosos jardines de Can Bordoy. Es un cambio de ubicación de última hora organizado por su hija Aina. Ella se sienta a su lado. Su presencia es una indicación de la importancia de su papel en el funcionamiento de la clínica, así como una muestra fundamental de apoyo al trabajo de su padre.
Sería conveniente definir al Dr. Morano como artista. Encajaría cómodamente junto a nuestras historias de diseñadores y artesanos. Pero él seguro que rechazaría esta denominación. Él es un científico y un médico cuyo objetivo no es plasmar su rúbrica en sus pacientes. “¿Quién te hizo los labios?” No es una pregunta que el Dr. Morano quiera que se les plantee a sus pacientes. “Cuando se hace bien, la medicina estética debe ser sutil y delicada”, nos dice. “Mejora lo que ya existe y se usa para evitar el deterioro”.
No podemos evitar examinar la cara del médico en busca de signos de su trabajo. Tiene líneas de expresión finas que le dotan de un gesto amable y hay un brillo natural en su piel. Él simplemente se ve saludable. Nuestra conclusión sin duda le gustaría, ya que una apariencia de buena salud es lo que más desea para sus clientes. “No se trata de ser guapo o feo. La buena salud es hermosa”, dice.
Nos invita a ir más allá de la imagen de la típica famosa vendada que se esconde hasta que las heridas provocadas por la intervención se hayan curado. Los tiempos han cambiado. Existen grandes avances. “No debemos identificar la medicina estética con tratamientos agresivos e invasivos que cambian nuestra expresión o la forma de nuestros cuerpos”.
Describe la efectividad del Revit-Facial para recuperar las propiedades fisiológicas de la piel más joven. El proceso consiste en inyectar a la piel vitaminas, aminoácidos, proteínas y una pequeña dosis de ácido hialurónico cuidadosamente distribuidas. Este último elemento también se usa para llenar los poros y eliminar imperfecciones.
Queremos saber si es doloroso. El Dr. Morano se ríe antes de asegurarnos que la aplicación de crema anestésica hace que el proceso sea más liviano. Él sabe de lo que está hablando ya que prueba cada tratamiento a sí mismo antes de ofrecérselo a sus pacientes. Eso explica su maravillosa piel. Lo que demuestra aún más confianza en sus productos es que también se los aplica a su querida hija.
Nos sorprende que a los veintiocho años Aina necesite cualquier tipo tratamiento. Pero luego lo entendemos. Para el Dr. Morano y su equipo el objetivo es la prevención. La misión es minimizar el impacto del envejecimiento haciendo pasos positivos hacia un estilo de vida más saludable. Es por eso que la clínica también aconseja a los pacientes sobre nutrición y ejercicio además de procedimientos cosméticos y estéticos. Un Revit-Facial es una parte opcional de un programa a largo plazo para optimizar la salud y belleza.
¿Eso significa que la belleza no es superficial después de todo? “La Organización Mundial de la Salud define la salud como el bienestar físico y mental. Estoy convencido de que la medicina estética es un beneficio físico y emocional”, dice el Dr. Morano. Ver a sus pacientes florecer en confianza en sí mismos es un recordatorio diario de que la naturaleza de su trabajo cambia la vida a las personas. Tal vez no sea un artista, pero ciertamente es un experto en reconocer el arte que hay detrás de cada rostro.
Fotos de Sara Savage
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