Magistral proyecto de jardín temático

Fue durante la pandemia cuando el arquitecto paisajista Johannes Dütsch y su equipo se encontraron trabajando en el proyecto ‘Brisa’.

“La parcela nos dio mucha libertad y paz”, dice, recordando cómo estar rodeados de naturaleza y montañas era como un bálsamo para el alma. “Siempre había una brisita de viento; así fue como llegamos a llamar al proyecto y a la finca, Finca Breeze”.

100% AUTOSUFICIENCIA, 100% PLACER

Ubicada en un terreno de 135.000 metros cuadrados, la maravillosa finca es “cien por cien autosuficiente”, con su propio pozo y parque solar. Además del clásico jardín de finca, resplandeciente de cítricos, palmeras y olivos, un huerto y una chimenea. Si lo prefieres, puedes pasar una tarde jugando a la petanca, dándote un chapuzón en la piscina o simplemente descansando en una de las sublimes terrazas a la sombra.

Mientras se ponían a trabajar en el terreno, Dütsch y sus colegas -una alegre banda formada por arquitectos paisajistas, dibujantes, diseñadores gráficos, ingenieros, botánicos, topógrafos y jardineros- se esforzaron por mantener su esencia. Transformaron una vivienda para animales de 300 años de antigüedad en una pequeña casa de invitados, y convirtieron un antiguo corral de pollos y cerdos en un pequeño huerto.

Rodeada por un muro de piedra, esta zona contenía unos enormes cactus de higuera junto con los cerdos y las gallinas. “Los cerdos se comían los higos y los cactus con pinchos protegían a las gallinas de los depredadores”, explica Dütsch.

REGALO DE LA NATURALEZA

Al principio, su mayor temor y reto era la falta de conexión eléctrica. Cuando él y su equipo descubrieron el pozo, fue como un regalo del cielo:

“Tener agua en abundancia nos dio la base para una propiedad autosuficiente. Añadimos 70 paneles solares y un paquete de baterías de iones de litio de casi 200 kilovatios de reserva, y ahora la casa nunca necesitará una conexión eléctrica”, afirma.

Texto por Anna Mason

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