Resulta que muchos consideran que el jardín es tan importante, si no más, que la casa. Este es especialmente el caso en una isla como Mallorca, con su sol fiable que se prolonga durante los meses de invierno. “Johannes Dütsch, fundador de My Landscaping Group, nos cuenta: “En el jardín se vuelcan muchas emociones. “Quizá porque es una parte viva de la casa y siempre está cambiando”.
Su amor por los jardines se sembró pronto, al crecer con uno grande en Múnich, aunque su decisión de estudiar paisajismo se cimentó en Leeds durante un año de voluntariado con personas discapacitadas cuando tenía 18 años. “Era una comunidad y pasé mucho tiempo trabajando en la granja y construyendo huertos”.
Visualizar un paraíso privado
Hay que tener una gran visión para imaginarse un paraíso privado cuando se contempla un terreno abandonado. “A menudo no hay nada, ni siquiera la casa”, dice. Afortunadamente para Johannes, visualizar el escenario final es algo en lo que destaca. Tras 15 años trabajando en la isla, tiene la experiencia necesaria para saber qué es posible, aconsejable y qué debe evitarse. No era así cuando llegó.
Durante su trabajo como aprendiz en Jardins de Tramuntana, se dio cuenta de que sólo el 20% de las plantas que había estudiado en Alemania tenían alguna utilidad en Baleares. Aunque trabaja mejor cuando tiene vía libre para diseñar un proyecto, algunos clientes traen ideas de sus viajes por todo el mundo. Por desgracia, algunas plantas no crecen en la isla. Aborda la relación con cada cliente con honestidad y transparencia. “Nunca digo que no”, afirma, “sino que busco la mejor alternativa”.
Más que un jardín
El terreno más grande en el que ha trabajado My Landscaping Group fue el de 250.000 metros cuadrados en Bunyola, propiedad del difunto Rainer Schaller. “Creamos una selva alrededor de la zona de la piscina por la que podías pasear y parecía que estabas en otro lugar completamente distinto. Al otro lado había un jardín de suculentas y cactus, y junto a la antigua capilla creamos un jardín formal de estilo inglés”. Pero no necesita un espacio tan grande para hacer magia.
Su cartera de jardines de finca es impresionante. Combinan plantaciones de cítricos, huertos autosuficientes, pistas de petanca, chimeneas, campos de golf de 4 hoyos y serpenteantes paseos diseñados para aprovechar las mejores vistas. A la hora de seleccionar árboles significativos, sobre todo olivos que pueden tener más de 2000 años, vuela a Alicante con sus clientes para elegirlos de una fuente de confianza. “Sólo tienes que caminar entre ellos. El árbol te encontrará a ti”, dice a sus clientes. Su comprensión y amor por la naturaleza, el gran diseño y las personas, son las razones por las que My Landscaping Group, como un jardín bien cuidado, es una empresa próspera que merece la pena conocer.
Texto por Emily Benet | Fotos de Jonathan Renso Barzola
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