Todo padre desea que su hijo crezca con confianza en sí mismo y con capacidad para salir adelante en la vida, para forjar su destino. También queremos que crezca con empatía, en especial hacia las personas que no sean como él y hacia las otras culturas.
El enorme valor de los intercambios internacionales de estudiantes para el crecimiento personal está probado: es importante el aprendizaje de otro idioma, es enriquecedora la experiencia de vivir en el extranjero y son incalculables las oportunidades que surgen para el acceso a la universidad o la búsqueda de empleo.
International Experience, gestionada por los Gillner, es una empresa familiar de tercera generación que lleva cuarenta años gestionando intercambios, y les apasiona hacerlo. Cada año cientos de familias confían en esta organización sin ánimo de lucro, ampliamente premiada, para que les proponga el mejor programa de intercambio, uno que se ajuste a sus necesidades, a sus expectativas y a las inquietudes particulares de sus hijos.
Entrevistas personales con la familia y con los hijos permiten decidir el mejor destino y programa para cada uno de ellos, ya sea en Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, Irlanda, Canadá, Suiza, Australia, Nueva Zelanda o muchos otros países. Hay posibilidad de elegir entre colegios públicos, privados o internados, por trimestres, semestres o cursos académicos. Antes de partir, los estudiantes reciben formación y orientación que les ayuda a prepararse, a saber qué van a vivir y cómo integrarse. Una vez en el extranjero, tienen apoyo personal las 24 horas del día. Todos los profesionales de International Experience han sido alumnos de intercambio, así que están preparados para asegurar el éxito y provecho de la estancia. La selección de las familias de acogida es meticulosa y los estudiantes se encuentran con un ambiente afectuoso y hospitalario.
Los alumnos vuelven habiendo experimentado el mejor año de sus vidas. Han hecho amigos y acuñado recuerdos, y el equipo de International Experience ve cómo han ganado confianza, iniciativa y autonomía, así como una visión del mundo más abierta y cosmopolita.
“En vez de barreras, construimos puentes para que nuestros hijos puedan caminar hacia un futuro mejor”. International Experience.
