Retrocedamos en el tiempo hasta la década de los 70: dos mujeres trabajando una al lado de la otra en la cocina de su restaurante familiar, simple pero popular. Los irresistibles aromas de la comida casera atrajeron al joven Benet Vicens a observar a su abuela y a su madre mientras cocinaban.
Verduras recién cosechadas, pescado traído esa misma mañana de Port de Sóller y frutas procedentes de la huerta, se transforman cariñosamente en platos que hacen que valga la pena el viaje hacia esta ubicación escondida. Es algo fruto de la inspiración.
En la actualidad, el chef Benet y su talentoso hijo Jaume se encuentran al frente de los fogones de la cocina de Béns d’Avall. La esposa de Benet (la madre de Jaume), Catalina Cifre, es la directora del restaurante, ofreciendo una sincera y calurosa acogida y liderando al personal de cara al cliente altamente encantador, y de gran profesionalidad.
Aunque este sofisticado restaurante ya no se parezca al sencillo restaurante que abrió sus puertas en 1971, tres aspectos se mantienen inalterados: las espectaculares vistas a la sierra y a la costa, la maravillosa tranquilidad del entorno y – lo más importante – los valores familiares que han dado forma al negocio y a la cocina, ambos en constante evolución.
La familia realizó mejoras en la terraza para la temporada 2016, aportándole un nuevo look elegante y extendiendo el espacio disponible. ¿A quién no le gustaría disfrutar sin prisas de un almuerzo al fresco en un entorno tan espectacular? ¿O cenar y observar cómo la puesta de sol concluye otro día perfecto en Mallorca?
A pesar de que Benet pasara una temporada en París en los años 80 y fuera inspirado por Ferran Adrià en los 90, su isla de nacimiento es la principal fuente de inspiración de la cocina balear distintiva de este padre y su hijo.
Los dos chefs son defensores de productos locales de temporada de alta calidad: “Nuestra cocina defiende y promueve los valores de la cultura de la isla, sus raíces y sus productos”, dice Benet. Al contar con proveedores locales, no solo garantizan productos frescos y auténticos sabores, sino que también apoyan a los productores, que se enfrentan de manera creciente a sus competidores, debido a la demanda de productos más baratos (pero de menor calidad) importados de fuera de las Baleares.
Estos sinceros valores e innovadoras técnicas culinarias se evidencian en cada plato que sale de la cocina de Béns d’Avall, ya sean del menú a la carta o de uno de los exquisitos menús degustación que ofrecen. Por todas estas razones, la “Guía Repsol” galardonó a Béns d’Avall con dos prestigiosos “Soles” para 2017.
