Port de Sóller

Vivir en Port Sóller es fácil. Si contemplas los tejados y el puerto desde tu terraza, sabrás por qué. Los placeres de una zona vacacional en combinación con el entrañable carácter de pueblo, hacen de este bonito rincón de Mallorca, un lugar en el que pasar largas temporadas.

Es una buena opción de inversión ya que una de las principales ventajas de comprar una propiedad en Port de Sóller es su calificación como “zona naranja” para la adquisición de licencias de alquiler vacacional. Esto supone que el alquiler sea más fácil que en otras zonas, como por ejemplo el vecino pueblo de Sóller.

La combinación de playa, ciudad y zona natural en los alrededores, aportan una indudable diversidad a la experiencia de vivir en el puerto. Date un paseo bajo las palmeras y podrás comprobarlo ti mismo. Podrás optar por un elegante apartamento frente al mar o una finca restaurada en la ladera que se extiende detrás del pueblo. Quizás te dejarás seducir por una de las múltiples villas junto al acantilado en la pintoresca ruta que sube al faro. Sea cual sea tu ideal de vivienda, seguro que conocerás a tus vecinos y te sorprenderás por la mezcla de nacionalidades, de aquellos que se han visto fascinados por el estilo de vida que aquí se respira.

Uno de los símbolos de Port de Sóller es sin duda, su característico tranvía de madera, una extensión del tradicional tren de Sóller. El tranvía eléctrico que circula entre el pueblo y el puerto, al más puro estilo de San Francisco, se suma a la singularidad de la zona. Para completar el viaje, es básico bajarse en el paseo marítimo para tomar un helado frente al mar.

Podrías pensar que el tranvía es una atracción puramente turística, pero en realidad, muchos residentes lo usan para desplazarse. Evitar el coche puede resultar lo más cómodo ya que el estacionamiento es bastante complicado, sobretodo los sábados cuando se celebra el mercado semanal en el pueblo.

Si decides desplazarte en tranvía no deberás tener prisa, el viaje entre Sóller y el pueblo dura aproximadamente una media hora y los residentes se benefician de un precio especial de 2 euros por trayecto. Original y tremendamente práctico, el tranvía es una gran opción de desplazamiento para los residentes y propietarios de segundas residencias.

La vida en Port Sóller gira alrededor de la bahía. Flanqueado por verdes montañas y espectaculares villas en la colina, este lugar es ideal para escapar de todo. ¿Y qué podría evadirte más que un cóctel en el Bikini Island & Mountain Hotel de temática tropical, o un tratamiento flotante en el lujoso spa del Hotel Jumeirah?

Si quieres abrir el apetito, vale la pena caminar hasta Torre Picada, una antigua torre de vigilancia. Desde aquí podrás disfrutar de las mejores vistas al puerto.

Un simple almuerzo o tomar algo en uno de los locales frente al mar, disfrutando de la vista y observando a la gente, es otro de los pequeños placeres cuando vives aquí. Disfruta de un breve paseo por arena en la Playa d’en Repic, antes de una cena al atardecer, sin duda un plan perfecto.

En lugar en el que el ambiente es relajado y las vacaciones y el disfrute son la clave, la comida y la bebida son un básico. Port de Sóller ofrece una oferta amplia y variada.

Disfruta de una experiencia gastronómica diferente en Neni, en la terraza del Bikini Island & Mountain Hotel. Un menú de inspiración israelí, libanesa y mediterránea se complementa con un entorno elegante y bohemio.

En la terraza frente al mar de Sa Barca podrás disfrutar de exquisito marisco y pescado fresco y el elegante Es Passeig está capitaneado por unos alemanes. El siempre amado Agapanto ofrece una propuesta mediterránea con un ambiente relajado pero elegante, a la luz de las velas y amenizada con música en vivo. Randemar, con un discreto estilo chic y un menú gourmet es una apuesta segura.

Só Caprichos es una de las últimas adiciones al panorama gastronómico de la zona. Ubicado frente a los veleros del puerto, con una amplia terraza, auténtica comida española y un excelente menú del día. Dentro del lujoso Hotel Jumeirah y con impresionantes vistas, se encuentra Es Fanals. No olvides reservar para poder disfrutar de los exquisitos giros de la gastronomía local. Los residentes se podrán beneficiar de un 20% de descuento en la factura.

A diferencia de otros lugares en Mallorca, las fiestas ruidosas no tienen cabida en Port de Sóller. La única ocasión en que la ciudad se inunda de ruido es durante las tradicionales fiestas patronales. A parte de estos días puntuales, la vida nocturna en este enclave se caracteriza por la discreción.

Eso no impide que en Port de Sóller se pueda disfrutar de buena coctelería. Cócteles al atardecer; cócteles durante la cena; cócteles por la tarde: si te apetece, incluso podrás degustar un buen coctel durante el desayuno. La pintoresca bahía, con una amplia variedad de bares, parece expresamente pensada para disfrutar en sociedad y mientras se observa el panorama.

Saca a la chica Bond que llevas dentro en Sa Talaia Pool Bar dentro del Hotel Jumeirah, que dispone de una cálida iluminación hermosa y y una piscina infinita. El restaurante Agapanto es especialmente popular; con noches de música en vivo que animan la atmósfera e invitan a los comensales a quedarse a tomar una copa después de la cena.

El bar junto a la piscina en el Hotel Bikini Island es joven y moderno, mientras que el bar del Hotel Espléndido tiene un bonito diseño y una exclusiva carta de bebidas.

Port de Sóller ha desarrollado una propuesta hotelera sin dañar su propia esencia: un pequeño y tranquilo puerto pesquero. Si bien hay algunos edificios de más altura, la bahía está afortunadamente libre de sobresaturación. En los últimos años, la tendencia se ha centrado en una planificada transformación de edificios de la década de los 70 en hoteles frescos, modernos y exclusivos perfectos para el viajero actual.

Jumeirah Port Sóller Hotel & Spa

No es exagerado afirmar que el desembarco de Jumeirah revolucionó Port de Sóller. La llegada de este hotel de cinco estrellas en 2012 confirmó el nuevo posicionamiento del puerto como un exclusivo pero discreto complejo vacacional. Aunque el hotel dispone de más de de 100 habitaciones, este establecimiento de la cadena hotelera Jumeirah, originaria de Oriente Medio, ofrece una sensación de intimidad. Una de sus características es el gran énfasis que se pone en el servicio, que es agradable y personal. Reclínate en una cama balinesa junto a la piscina infinita, disfrutando de impresionantes vistas al Mediterráneo mientras te preparan una mesa en el mejor restaurante del hotel, Es Fanals.

Hotel Espléndido

El Espléndido es un hotel clásico de los años 50 que se ha restaurado muy acertadamente para el renacimiento del siglo XXI de Port de Sóller. Aquí, encontrarás una clientela muy diversa, des de familias hasta parejas, que disfrutan de las 82 habitaciones que tiene este establecimiento de propiedad sueca. Hay dos piscinas, una sauna y un hammam, además de un excelente bar y bistró. Una de sus singularidades es la atención al detalle. Ubicado justo frente a la playa, es altamente recomendable pedir una habitación con vistas.

Hotel Es Port

Como antigua mansión, el Hotel Es Port tiene ese distintivo aire mallorquín que lo convierte en un lugar encantador. Donde quiera que mires verás cálida madera, piedra natural y ropa de cama blanca. Jardines verdes, relajantes terrazas y salones, un spa, piscina y pistas de tenis hacen que sea un lugar perfecto para experimentar la hospitalidad de la isla.

Bikini Island & Mountain Hotel

Aunque el nombre puede recordar a los populares dibujos animados de Bob Esponja, no dejes que eso te disuada. La decoración inspirada con el diseño de finales de los años sesenta y principios de los setenta, en este hotel solo para adultos se crea un paraíso de lujo informal, envolviendo a los huéspedes en una sensación de glamour bohemio.

Como parte de la zona de la Tramuntana, protegida por la UNESCO, la normativa urbanística en Port Sóller y sus alrededores, es bastante estricta. Por este motivo, para aquellos que deseen crear la casa de sus sueños, les resultará más facil renovar una antigua propiedad que construir una desde cero.

La mayoría de los trabajos se centran en reformas y extensiones, por lo que muchas propiedades fusionan modernidad con carácter tradicional. En la zona portuaria villas y apartamentos de construchay disponibilidad de villas y apartamentos relativamente nuevos, aunque las restricciones de construcción, afortunadamente, han evitado la saturación urbanística. Hay varias agencias inmobiliarias que ofrecen una amplia gama de completos servicios relacionados con las propiedades.

La luz y el paisaje que ofrece Port de Sóller son un sueño para cualquier artista. Para aquellos que no puedan ganarse la vida con un pincel, hay otras opciones.

La defensa de la isla como un destino durante todo el año, llevada a cabo por las instituciones mallorquinas, ha sido sin duda todo un éxito. Son muchos los amantes de la naturaleza que vienen al noroeste de la isla durante los meses más tranquilos para practicar senderismo y ciclismo. Esto ha creado una industria dedicada a la aventura al aire libre en la región de Sóller, que incluye desde alquiler y mantenimiento de bicicletas hasta servicios de guía y alojamiento de invierno.

Si bien todo lo relacionado con el mundo de la construcción suele asociarse a empresas que tienen un profundo conocimiento del sistema administrativo local, muchas de las empresas relacionadas con la propiedad a menudo son gestionadas por extranjeros. El bienestar también es importante, con profesionales que ofrecen desde yoga y masajes hasta servicios de belleza y terapias alternativas.

El desarrollo de las nuevas tecnologías facilita a las personas que trabajan de forma remota con posibilidad de hacerlo desde cualquier lugar. También hay cierta tendencia a los desplazamientos de larga distancia; Port de Sóller está a 35 minutos en coche del aeropuerto, y desde aquí hay un corto trayecto a varias ciudades, incluida Barcelona.

Las personas que se mudan a Port de Sóller tienden a valorar la discreción, a apreciar la autenticidad, el entorno natural y la buena vida. Si lo que buscas es codearte con glamurosas celebridades, probablemente estés en el lugar equivocado; aunque podrás toparse con algún que otro autor. La periodista y autora Anna Nicholas vive en la zona, al igual que sus colegas escritores Shirley Roberts, Deirdre Quiery y Neil Doloughan.

Es evidente que el municipio de Sóller tiene más habitantes que la zona de Port de Sóller, aunque el número de personas que pasan aquí todo el año supone que el pueblo siga vivo y con muchos negocios abiertos incluso durante la temporada baja. Creativos, jubilados, familias jóvenes y emprendedores forman una pequeña comunidad rica y diversa.

Seguro, con encanto y con fácil acceso a Palma, es un lugar perfecto para retirarse, trabajar o criar a tus hijos. La región de Sóller es un perfecto ejemplo de la buena convivencia que hay entre los residentes locales y los nuevos residentes llegados de diferentes partes del mundo.

En Port de Sóller conviven todos los colores: el azul del mar, el excepcional verde de las colinas y la jovialidad cromática de las flores. Si bien el invierno puede ser demasiado tranquilo para algunas personas, para otros, es exactamente esta sensación de paz y un entorno natural lo que los atrae. Para otros, la oportunidad de pasar varios meses de primavera y verano al año en una propiedad que se adapte a su gustos es suficiente.

La proximidad del casco antiguo, a unos 5 km de distancia, mejora aún más la calidad de vida en la zona del puerto. Aquellos que viven aquí, adoran poder de pasar tiempo en ambos lugares, tan cercanos y a la vez tan diferentes. Los prósperos restaurantes y negocios, los amigables sollerics y los residentes provenientes del Reino Unido, Francia, Alemania y Escandinavia agregan un ambiente más internacional. Todo ello convierte en Port de Sóller en uno de los lugares más deseables de Mallorca.