Eva Shakouri

La fascinante historia de una idealista nacida en Irán y residente en Mallorca

Galerista o “consultora de arte”, así es como se describe Eva Shakouri a sí misma, pero ninguno de estos dos términos hacen justicia a lo que en realidad consiguen esta emprendedora menuda y su hermano Amir. Nacidos en Irán, de padre turco/iraní y madre española, se mudaron a Europa cuando Eva tenía 10 años: “La guerra entre Irán e Iraq seguía en pie y era complicado conseguir suministros básicos. Mientras los niños de Occidente se emocionaban con juegos modernos, para un niño iraní lo más maravilloso era que le dieran un plátano.”

Cuando se mudaron en 1983, todo el mundo vestía igual: “Caminabas por las calles de Teherán y te daba la sensación que el color dominante era el gris. Al llegar al aeropuerto de Heathrow y a Europa, lo que más nos chocó fue la cantidad de color. ”

La familia vivió en Mallorca durante unos años tras pasar unas vacaciones aquí y antes de mudarse a Londres; ciudad en la que Eva estudió su carrera, especializándose en literatura francesa. Pasó un año en París (Sorbonne y British Council) durante el cual asistió a unos cursillos en historia del arte. Tras cursar un innovador programa de MBA durante tres años en una escuela de negocios en Francia, por el que pasó temporadas trabajando y estudiando en Francia, España y Londres, Eva entró a trabajar como asesora en Monitor, una empresa de estrategia corporativa.

En Milán trabajó en la reestructuración del grupo Fininvest de Silvio Berlusconi, cuando éste pasó a la política. ¿Lo conoció? “No, estaba en un puesto junior,” se ríe. “¡Y no fui una de sus chicas bunga bunga! Yo en vez de ser rubia y voluptuosa, era pequeña y pícara… ¡no me hubiese ido muy bien en el grupo Berlusconi!” A Eva le encantaba su trabajo, pero a los 28 años dudaba sobre el camino que llevaba y decidió tomarse un año sabático en Mallorca para “pensar”. Al enterarse de que el Ayuntamiento de Calvià buscaba subcontratar artistas locales y gestores de cultura, Eva y Amir presentaron una propuesta con éxito: “Preparé una presentación en Powerpoint al más puro estilo management. ¡Debieron de pensar que era una alienígena cuando me presenté en el ayuntamiento con eso!”

Tras dos años aprendiendo mientras trabajaban, y viendo que el mundo tan cambiante del arte necesitaba nuevos modelos de trabajo, abrieron su propia galería. La Caja Blanca trabaja con grupos de coleccionistas que suelen adquirir una obra de arte antes de que se produzca, prácticamente a precio coste, sabiendo que dentro de dos años estará en un museo y que su valor habrá incrementado.

“Es ideal para los coleccionistas y conseguimos un fondo de dinero para proyectos que de otra manera no habrían existido.”

A los hermanos también los contratan para desarrollar proyectos de arte para museos y fundaciones por todo el mundo. “Lo que ves en La Caja Blanca es sólo la punta del iceberg, ya que esto es por amor al arte y todas las otras cosas que hacemos son negocios que hemos desarrollado a su alrededor.” Varios artistas con los que han trabajado han pasado a tener muchísimo éxito, entre ellos Katie Paterson (busca su increíble Earth-Moon-Earth – Moonlight Sonata Reflejada desde la Superficie de la Luna en Google), y el artista Richard Mosse, quien representará a Irlanda en la Venice Biennale de 2013.

Durante cuatro años, Eva ha sido la encargada del público internacional de la Nit de l’Art en Palma. Cree que habría que reconocer a los galeristas veteranos de la isla: “Ellos vieron que el lado social del mundo del arte estaba muy cansado y, hace 15 años, iniciaron un evento de arte que serviría de inauguración promocional del calendario cultural tras los meses del verano.”

¿Podría promocionarse mejor? “Eso es un tema muy debatido,” contesta Eva. “Creo que es uno de los secretos mejores guardados. Los enterados del mundo del arte en Europa lo conocen: una hora antes de que empiece llega gente del Reino Unido, Alemania, EEUU, Rusia y Oriente Medio con sus mapas. Lo que a menudo nos decepciona es la falta de público general ya que creemos que el arte también tendría que llegar hasta ellos.”

Cree que la ubicación de la que goza Mallorca llevará a que se celebren aquí grandes encuentros del mundo del arte internacional. “Una de nuestras ambiciones es empezar con un pequeño simposio, que con suerte iniciaremos el año que viene. La Nit de l’Art seguirá siendo la celebración inaugural de la temporada, pero también queremos enlazar encuentros y exposiciones que acaben convirtiéndose en una serie de eventos que se celebran durante 10 ó 15 días.”

¿Y qué hay de la crisis? “En el mundo del arte, cuántas más restricciones, mejor es el arte. Necesitamos financiar a las personas que viven de eso. Hay que ser tan ingenioso como queremos que lo sean los artistas y desarrollar nuevos modelos para que sea sostenible. Y allí es donde entra la innovación. Es una época realmente emocionante para los que disponen de energía y emoción.”

Eva, galerista, consultora de arte y mucho más, dispone de ambas cosas.

Contacto

La Caja Blanca

C/ Can Verí, 9, Palma