Para muchos residentes en Palma, Santa Catalina es la mejor zona de la ciudad para disfrutar de una buena comida, sobre todo por la variedad que ofrece. Hay opciones para todos los gustos, tanto si se busca un bocado rápido como si uno quiere tomarse su tiempo para comer. Las cartas se renuevan con frecuencia para cumplir con las expectativas de los amantes de la buena mesa y, como las noticias vuelan en Mallorca, los restaurantes se llenan pronto. Prepárate pues para relamerte con nuestra lista de los 12 mejores establecimientos de Santa Catalina.

12. Sumaq
Para degustar la mejor cocina peruana de la isla, dirígete sin dudarlo a Sumaq, en la esquina de la calle Cotoner. Allí te servirán platos estupendos del país de su chef, Irene Gutiérrez, que trabaja con ingredientes frescos y sabrosos del cercano mercado de Santa Catalina. Sumaq ofrece una auténtica aventura gastronómica que hace repetir una y otra vez a los lugareños.
11. Duke
Si eres amante del mar y de un ambiente relajado, pásate por Duke’s, en la calle Soler, donde las paredes están forradas de tablas de surf. No te sorprendas si te vas mirando el pronóstico de las olas mientras disfrutas de la comida de origen local. Y aunque comer con elegancia puede parecer una tontería en Duke’s, recuerda que de eso se trata. Se trata de un lugar relajado para los amantes de la comida que sólo quieren disfrutar de ella. Un lugar ideal para venir en familia.
10. El Txoko de Martín
Desde el bacalao con salsa de puerros tradicional vasca hasta la ternera gallega, no hay quien le gane al chef Martín Berasategui en la cocina del norte de España que se siente de alta gama. Este chef con 12 estrellas Michelin está en Santa Catalina, en uno de los cruces más concurridos del barrio: la Plaza del Pont. Un lugar ideal para reunirse con un grupo de amigos y disfrutar de comida de alta calidad en un ambiente relajado.
9. WineSpot Restaurant & Bar
Escondido en una esquina cerca de la Plaza Progreso se encuentra el moderno Wine Spot Restaurant & Bar. Visítalo a partir de las 6 de la tarde cualquier día de la semana y disfruta de una gran selección de vinos locales acompañados de un menú mediterráneo igualmente delicioso. La cocina se rige por platos clásicos como el pulpo (recogido a mano en el Mercat d’Olivar) con patatas al pimentón. Los que adoraban el Ribello de La Lonja se sorprenderán al ver a Lucas Balbuena, que estuvo al frente del Ribello durante 10 años. Aquí está igual de implicado.
8. Bistro Esencia
El Bistro Esencia es uno de esos lugares por los que se puede pasar sin darte cuenta de lo especial que es. Luciano, nacido en Génova, es un chef que cocina desde su corazón y su herencia. Los platos italianos reinventados son el foco principal, pero también hay algunas influencias mallorquinas. El interior es acogedor y perfecto para una cena romántica o una copa tranquila con amigos. El ambiente es personal y no se diferencia de estar sentado en el salón de alguien.
7. Naan
La comida propia de los puestos ambulantes del mundo ha entrado con fuerza en Santa Catalina. En un ambiente relajado y al mismo tiempo vibrante, este establecimiento sirve unas especialidades que resultan muy apetecibles. Aquí siempre hay bullicio, con residentes y turistas compartiendo historias ante una suculenta comida a buen precio.
6. Santa Restaurant & Bodega
El oscuro y misterioso Santa Restaurant & Bodega está situado en la concurrida calle principal, la calle Fábrica. Se trata de un restaurante muy apreciado por residentes y visitantes. Esto se debe a dos razones. En primer lugar, el chef Bernabé Caravotta (de Vandal) está en la cocina y es conocido por su cocina experimental. En segundo lugar, el menú está tematizado por los siete pecados capitales. Un giro culinario maligno lo suficientemente seductor como para llevar a los comensales por el mal camino, perfecto si se busca algo un poco diferente.
5. Stagier
Este restaurante se convierte en algo exclusivo cuando te das cuenta de que sólo tiene siete meses para unos afortunados comensales. Este restaurante a las afueras de Santa Catalina sirve creativas tapas hechas por el chef Joel Baeza, que sabe cómo sorprender y a través de sus curiosos y novedosos platos. Prueba su menú de 8 platos, donde los sabores viajan entre lo mediterráneos y lo chileno. El resultado hará que tu idea sobre las tapas tradicionales cambie por completo. Stagier está reinventando las tapas en Palma.
4. Market Kitchen
Situado justo enfrente del mercado, este acogedor restaurante es claramente británico con algunos toques mallorquines. El equipo de marido y mujer, Rob y Amber Kirby, está al frente del local, y complace a la ciudad con su versión de Fish and Chips (con bacalao rebozado en cerveza), así como con otros platos como el «London Calling» Salt Beef Bagel y la Chicken Caeser Salad. El restaurante es pequeño, con sólo unas pocas mesas, así que prepárate para reservar con antelación, especialmente los domingos para su asado inglés.
3. Isaan
Isaan es exactamente lo que necesitas cuando tienes capricho de sabores frescos y buena cocina tailandesa sin necesidad de viajar a Tailandia. El más nuevo de los tailandeses de Santa Catalina sirve platos muy apetecibles, fragantes y especiados. Isaan es perfecto para grupos y también para parejas, aunque uno siempre puede comer en solitario y dedicarse a observar la acción de la cocina, que está abierta a la sala.
2. Vandal
Con una fachada oscura e inquietante, Vandal entusiasma a muchos por su excelente servicio e innovadora gastronomía. La colaboración del chef y sumiller resulta en platos vistosos que están llenos de sabor. Cabe tener en cuenta que aquí puede llegar a haber bastante ruido, así que tal vez no sea el sitio ideal para una cita romántica.
1. KOH Mallorca
KOH Mallorca llega a lo más alto, demostrando una vez más que los visionarios de los restaurantes Edgar Lagassi y su equipo de Five Senses Collection saben lo que hacen. Se trata de una cocina del sudeste asiático con el enfoque de un gran talento. El menú ofrece una atractiva y ecléctica variedad de platos de inspiración tailandesa y vietnamita y el diseño interior – de Aggi Bruch – te transporta a algún lugar hermoso en la gama de Bangkok y la ciudad de Ho Chi Minh.Santa Catalina puede presumir de oferta de restauración y no tiene nada que envidiar al Soho. Con chefs de estrella Michelin y establecimientos abiertos hasta tarde, pizza para llevar o comida en crudo, es difícil encontrar un lugar con una oferta tan diversa, si no es en Londres o Nueva York. Sin duda esta barriada es una joya para amantes de la buena comida y la buena mesa.