En palabras del novelista Wendell Berry, “no poseas tantas cosas como para que te sientas aliviado si tu casa se incendia”. Aunque a la mayoría no se nos pasa por la cabeza prenderles fuego, muchos tenemos objetos que no nos aportan nada. En vez de pasarte la próxima década posponiendo la decisión acerca de qué hacer con ellos, ¿no sería mejor decirles adiós ahora, sobre todo si gracias a este gesto contribuyes a mejorar la vida de otra persona?
La Fundación Allen Graham es una organización benéfica radicada en Mallorca que puede aprovechar todo aquello que ya no necesites. Las ganancias que obtienen en sus dos tiendas se destinan a ayudar a numerosos niños que tienen a sus espaldas un trágico pasado. Entre otros muchos proyectos, esta organización caritativa financia asimismo casas seguras destinadas a aquellos jóvenes que ya no pueden permanecer en hogares de acogida.
Mientras que su tienda de Cas Català es un pequeño tesoro, el establecimiento de la Fundación Allen Graham situado en Port de Pollença, donde tienen cabida diferentes artículos, tiene una mayor superficie. Aceptan mobiliario, objetos decorativos, libros, ropa y juguetes. Sin embargo, no son un vertedero. “Te sorprendería saber cuánta gente nos dona muebles con carcoma”, comenta su directora, Rosemary Stone. Si, por vergüenza, no le regalarías determinada pieza a un amigo, tampoco se la dones a ellos.
Por su parte, la Fundació Deixalles da salida a objetos con pequeñas imperfecciones. Esta admirable organización benéfica contrata a personas en riesgo de exclusión social y promueve un modo de vida sostenible en sus dinámicos centros de recogida, situados en diferentes puntos de la isla. A semejanza de la Fundación Allen Graham, pasan a buscar aquello que no desees gratuitamente. A continuación, seleccionan los mejores artículos, que destinan a sus tiendas palmesanas ubicadas en la calle Blanquerna y en la Plaza Madrid. Reparan, modifican o reciclan el resto. A todas aquellas personas preocupadas por el medio ambiente les resulta francamente gratificante saber que muchas cosas tendrán una segunda vida.
Quizás pretendas reunir dinero para destinarlo a otras nobles causas, o puede que desees embarcarte en proyectos personales que habías tenido que posponer. Wallapop, el equivalente español a Gumtree, es una app fácil de usar que te permite poner a la venta diferentes artículos que se abonan en efectivo. Los compradores de la isla estarán encantados de acercarse a recoger lo que han adquirido.
Si tienes dudas acerca de si deshacerte de algo, recuerda el consejo de William Morris, diseñador textil y poeta del siglo XIX: “No tengas nada en casa que no sea útil o que no creas que es bello”. Lo mejor de todo es que, dado que todos somos diferentes, hay muchas posibilidades de que alguien crea que ese objeto es útil y bonito, y se alegrará de haberlo encontrado. ¿Y a quién no le gustan los finales felices?
