Nos detenemos en un alto de Son Vida y miramos hacia abajo, al lugar donde hemos quedado, una villa de lujo con muros de piedra mallorquina.Las barreras se abren para mostrarnos un amplio camino que nos lleva hasta los promotores inmobiliarios Fabien y Charlotte Leduc, que nos reciben con una sonrisa. Entramos y atravesamos un impresionante salón con grandes ventanales que van del techo al suelo. Fabien expresa su satisfacción por el diseño, antes de sacar a colación las otras dos propiedades que él y Charlotte también han construido. Un proyecto que, sin la ayuda de Lionsgate Capital, no se habría desarrollado con tanta facilidad.
Después de llegar a Mallorca y entusiasmarse en Santanyí con lo que Fabien califica como “noción atemporal”, decidieron quedarse y crear viviendas de lujo. Él nos habla de la financiación con la que inició su aventura, antes de detallar un momento difícil, cuando el banco se mostró reacio a financiar su segunda propiedad. Fabien, recostado en el sofá, dice que era comprensible, ya que su primera vivienda aún estaba en obras. Empieza a contar que se propuso buscar otras alternativas y se detiene para esbozar una sonrisa y dar una palmada. “Entonces ¡vi la luz! ¿Cuándo? Como no podía ser de otra manera, al abrir un número de abcMallorca”. Nos reímos. “¡No es broma! Leí un reportaje sobre Lionsgate y dije: ‘Vale, vamos a intentarlo’”. Lo que sucedió después es lo que Fabien llama “un trabajo bien hecho”, con una firme ética profesional y un generoso apoyo durante todo el proceso.
Al mencionar los problemas que pueden encontrar las personas que no hablan español para comprar una propiedad en Mallorca, todos asentimos. Fabien recuerda su traslado desde Francia y las dificultades que surgieron al tratar con los bancos españoles, algo en lo que Lionsgate ayudó. “Al final, me ahorraron mucho tiempo. El coste de sus servicios resulta muy razonable si tenemos en cuenta todo el trabajo que hicieron”.
Fabien explica que la clave fue trabajar con el equipo adecuado. “Tenía a María José, mi persona de contacto para todo, súperprofesional, una enamorada de su trabajo”. A decir de Fabien, Lionsgate cuenta con “gente buena”, cosa que supone “todo un mérito”. Hacemos una pausa. ¿Compensa contratar sus servicios? “Totalmente”, asegura con una sonrisa. “Yo los considero parte de nuestro equipo”, dice en alusión a su actividad inmobiliaria. Salimos a una amplia terraza con una piscina perfecta. Fabien hace referencia con gestos a la arquitectura y a sus planes para hacer crecer su empresa. Muestra su amor por la piedra mallorquina y el tipo de construcción que se basa en el equilibrio y una cuidada alineación. No podemos evitar la analogía cuando Fabien expone cómo se configuran sus proyectos. “Se trata de tener gente buena a tu alrededor”, indica mientras admiramos el encaje de una piedra con otra. Hablamos del talento que hay en Mallorca y Fabien muestra su acuerdo. Todo comienza con la gente de Lionsgate.
Photos by Sara Savage
Contacto
