Los cuatro mejores mercados de Mallorca

Productos autóctonos frescos y espíritu de comunidad

En Mallorca se aprecian mucho las tradiciones propias, y eso se nota muy especialmente en los mercados de productos alimenticios. Punto de encuentro semanal, los mercados congregan a los lugareños, que buscan en ellos novedades, el suministro semanal de frutas o verduras, y una atención al cliente como la de antaño. Los mercados tradicionales normalmente se encuentran en la plaza principal de la localidad, se extienden por su centro y atraen a personas de toda la zona. Tanto para el visitante como para los residentes extranjeros, satisfacen muy bien la curiosidad y el deseo de conocer la cultura local. ¡Mira qué cuatro mercados destacamos nosotros y empieza a planificar tu recorrido por la isla!

1. Mercado de Pollensa

Todos los domingos, entre las 8 y las 13.30 horas, un mercado de hasta 300 puestos llena las calles de la parte más antigua de Pollensa. En la Plaza Mayor está el corazón del mercado, que luego se despliega por las calles secundarias circundantes. Hay aquí delicados productos artesanales, en puestos que venden cuencos de cerámica, capazos de paja y joyería hecha a mano. ¡Es el lugar ideal para quien busque un bonito recuerdo para regalar o darle un toque mallorquín a su hogar! La pintoresca estética de Pollensa hace que éste sea un mercado con mucho encanto para pasear sin prisas y pararse a tomar algo en uno de los bonitos cafés de sus calles. Por celebrarse en domingo, tiene un ambiente relajado y una afluencia de público constante. Sin embargo, a medida que avanza el día, aumenta el número de personas y las estrechas calles pueden llegar a abarrotarse; por tanto, es mejor acudir cuanto antes.

2. Mercado de Inca

Éste es, claramente, uno de los mercados más grandes de Mallorca, muy conocido por sus artículos de cuero. Las horas pasan fácilmente a medida que paseas entre puestos de zapatos, bolsos y chaquetas de piel. Por su tamaño, este mercado ofrece mucha variedad, así que los visitantes pueden comenzar con un puesto de cinturones de cuero y pronto encontrarse echando un vistazo a macetas y jabones caseros. La diversidad de productos es amplia, de modo que el mercado suscita un gran interés. Muchos pueblos de los alrededores se benefician de la rica variedad de productos que se encuentran en Inca, y eso se nota en los grupos de personas que se paran a charlar entre los puestos. Encontrarás el mercado en la Gran Via Colom todos los jueves, de 8 a 13 horas.

3. Mercado de Santa María

Otro mercado dominical y el que, necesariamente, tienes que visitar si buscas un mercado agrícola. Si vas a Santa María cualquier otro día, te encontrarás con un tranquilo pueblo, típicamente mallorquín, donde los jubilados juegan a las cartas al sol de la tarde. Sin embargo, cuando llega el domingo, el pueblo entero cobra vida y atrae a compradores de los alrededores. Entre las 8 y las 13 horas, multitud de personas se congregan aquí para comprar fruta, verdura, flores y animales. La principal concentración de puestos se encuentra en la Plaza Nova, que está rodeada por restaurantes y cafeterías, perfectos para hacer una parada y tomarse un café. El mercado de Santa María está recomendado para quienes busquen productos orgánicos y vino. No en vano su comarca tiene mucho atractivo para los amantes del vino por su variedad de uva.

4. Mercado de Sineu

Todos los miércoles, entre las 8 y las 13 horas, Sineu se convierte en punto de encuentro para agricultores y propietarios de tierras de la isla, gracias a su mercado agrícola y ganadero. Entre todos los mercados, Sineu es el más tradicional y, aún hoy, aquí se venden animales. También hay puestos que venden frutas frescas, plantas y flores, así como ropa, joyas y textiles. El núcleo del mercado está en la Plaza Des Fossar y los puestos se dispersan por las calles circundantes. Definitivamente vale la pena visitarlo si uno está interesado en la vida rural mallorquina y quiere conocer la agricultura local. ¡Prepárate, porque puedes llegar a casa con un cordero, una cabra o un burro!

Es posible ir en autobús a la mayoría de los mercados de Mallorca, especialmente desde Palma. Pero es mucho más fácil ir en coche, una opción que da flexibilidad para quedarse en el lugar el tiempo que uno desee: ¡una simple visita de dos horas pronto puede convertirse en una de medio día! Sineu o Santa María son localidades rurales, así que puede ser difícil aparcar (particularmente en los meses de verano). Si lo que buscas es una experiencia en un mercado más urbano, lee “Comer en un mercado de Palma”, donde encontrarás referencias de algunos de los lugares más sabrosos de la ciudad para almorzar.