Come en un mercado de Palma

Empápate de la auténtica tradición mallorquina en uno de los mercados de Palma

Mercado de L’Olivar

El mercado de L’Olivar, situado justo al lado de la plaza de España, es lugar para los productos frescos, que llegan cada semana desde todos los rincones de la isla. Los puestos de fruta fresca, hierbas aromáticas, pescado y carne están llenos de color y crean un ambiente vibrante para hacer la compra semanal. Sin embargo, rara vez se ve el mercado como un sitio para parar a descansar y a comer. Aquí se encuentran generosas cantidades de productos que degustar, pero el mercado también va mucho más allá y sirve pescado a la parrilla, tapas tradicionales y tablas de embutidos, con un nivel culinario que rivaliza con muchos restaurantes cercanos.

El mercado es típico: hay pescadores gritando sobre cajas de pescado, los hombres de negocios se codean con los carniceros y, en general, todo el mundo charla con todo el mundo. Este sociable ambiente atrae a los lugareños aquí cada semana, contribuye a la animación del sitio y, sobre todo, hace que la comida sea divertida. Una loncha de jamón sin un amistoso saludo no es lo mismo; un trozo de queso sin una sonrisa no es igual. O sea, que es menos entretenido. El ambiente acogedor y amistoso que se encuentra en el mercado de L’Olivar da vida a la comida y hace que se disfrute más.

Con una cerveza en la mano, los mallorquines a menudo prefieren comer de pie y conversar entre ellos. Es una forma tradicional de disfrutar la comida, permite conversaciones abiertas y comunicación entre los diferentes puestos. Con dos zonas principales, el mercado se divide en un mundo de botas de agua y hielo (el área del pescado) y otro de frutas y carnes. Por tanto, el almuerzo, si así se desea, puede ser una mezcla de todo.

Para probar tradicionales tapas, puedes empezar en Buades, un puesto regentado por una misma familia desde hace cuarenta años. Aquí sirven tablas de jamón ibérico y pan con aceite de oliva, que ahora puedes degustar sentado. Después de unas cuantas cervezas, tal vez te apetezca cambiar de sitio y trasladarte a la zona del pescado. Ve a la parte posterior y allí encontrarás El Cocedero, un puesto decorado en blanco y dorado que ofrece marisco cocido y a la plancha. Pide gambas frescas y te las servirán perfectamente fritas, chisporroteando en aceite y ajo. O enfrente es donde se halla la popular combinación de ostras y champán, que muchos consideran una especialidad.

A medida que te acercas a la salida, es difícil pasar por alto el neón de Pink Gamba & Pink Salmon, famoso por su sushi y sus ollitas de salmón. Los precios aquí, y en todo el mercado, pueden considerarse elevados, pero reflejan la calidad de los ingredientes. El mercado de L’Olivar ofrece deliciosos productos locales y la animación propia de los mercados municipales. Y nadie puede ponerle precio a eso.

Mercado de Santa Catalina

El mercado de Santa Catalina es el corazón palpitante de Santa Catalina. Tanto si uno hace la compra semanal de verduras en Eco Sa Teulera como si adquiere un ramo de flores en Miquel Capellà, se disfruta mucho paseando por los pasillos y viendo su animado ambiente. Igual que el mercado de L’Olivar, éste es lugar para comprar y también para pararse a comer. Los platos tradicionales pueden encontrarse en el bar Joan Frau, uno de los locales más concurridos del mercado, donde sirven especialidades de la isla, como frito mallorquín, croquetas y paella. Si tienes la suerte de conseguir mesa, ¡estarás sentado detrás de la barra, justo en el centro de la acción! O si eres amante de la cocina japonesa, te encantará el sushi y el dim sum de Arume, donde los sábados se congregan los fiesteros, antes del inicio del tardeo.

San Juan

Famoso por ser el primer mercado gastronómico de las Baleares, San Juan, en S’Escorxador, se dedica a la cocina internacional. Sentados en diferentes espacios, los comensales disfrutarán examinando la variedad de especialidades en oferta. Con ostras, pinchos, noodles o sushi, todos los gustos quedarán satisfechos. Largas mesas con taburetes se alinean en el centro, con lo cual se facilita la interacción entre turistas y población local. Éste es un buen mercado al que acudir especialmente por la noche. De hecho, mucha gente opta por ver una película en Cineciutat, que está justo enfrente, y terminar luego cenando en San Juan. El mercado también acoge eventos especiales durante todo el año, gracias a la amplitud de sus espacios. Hay salas para eventos privados, además de un bar y una cocina para demostraciones gastronómicas.

Mercat 1930

El Mercat 1930 es el mercado gastronómico más nuevo de Palma y, para muchos, el más exclusivo. Ubicado en el famoso paseo marítimo, junto a la discoteca Tito’s, es frecuentado por quienes atracan sus yates en el vecino puerto. Eso le da un toque de glamur y brillo al lugar, donde comen personas de todo el mundo antes de aventurarse en la ciudad. Con la misma filosofía del San Juan, Mercat 1930 sirve cocina internacional, desde embutidos ibéricos a fajitas, tapas, hamburguesas o sushi. Las ostras son una opción recomendada, ya que las proporciona Daniel Sorlut, cuyo puesto en el mercado de L’Olivar destaca por el gran sabor y frescura de sus productos.

Los comensales pueden optar por comer dentro o fuera, un espacio particularmente codiciado durante el verano, donde las mesas se ocupan durante horas y horas. Una velada cálida cerca del paseo marítimo, una copa de champán y unas tapas… ¡No sorprende que la gente esté tan a gusto!

Contacto

Mercat de l’Olivar

Plaça de l'Olivar, s/n, Palma